11 de noviembre, 20082 comentarios

En 1992 Jarle Wanvik empezó a darle vueltas a la idea de un ascensor de bicicletas que pudiera subir a ciclistas y sus bicicletas por una empinada cuesta de Trondheim, Noruega. Un ascensor que permitiera superar una dura subida sin tener que bajar de la bicicleta y que no supusiera una pérdida de tiempo. Wanvik se topó con la buena suerte de que su propuesta de un elevador de bicicletas tuviera una buena acogida por parte de la administración pública » Leer la entrada completa…